Visten la casa con elegancia, suman calidez, dan un twist a la decoración y además ganamos intimidad, al protegernos de miradas indiscretas. No hay duda, las cortinas son los textiles por excelencia en nuestra vivienda.
Un complemento que no solo sirve para decorar. En Decorablog conocemos su importancia y por eso queremos compartir contigo algunos errores frecuentes al escoger las cortinas de casa. ¿Quieres descubrirlos? ¡Pues toma nota!
No tener en cuenta el tipo de ventana
Un error muy frecuente es preocuparse por las cortinas y descuidar lo más importante: la ventana. Ella será la que determine el tamaño y el diseño de nuestra cortina. Por ello, en Decorablog te recomendamos tener en cuenta, no solo las medidas de tu ventana, sino también su sistema de apertura, ya que esto puede ser un problema al colocar las cortinas. En algunos casos, tal vez sea más interesante optar por un estor que se recoja completamente.
Olvidarse de si nuestra habitación es exterior o interior
También hay que tener en cuenta la orientación de nuestra habitación. Recuerda que los espacios orientados al norte reciben menos luz natural. Por el contrario, las habitaciones orientadas hacia el sur son más luminosas.
Esto es importante ya que determinará el tejido y las características de nuestra cortina. Es decir, tal vez un diseño que permita el paso de la luz en una habitación oscura o algo más tupido para tamizar la luz del sol. Ten en cuenta que las cortinas también tienen como objetivo lograr algo de intimidad en casa y protegernos de la luz. Por eso hay que tener en cuenta este detalle al escoger nuestro textil.
No tomar medidas correctamente
Parece una obviedad, pero así es. Así que coge cinta métrica y anota las medidas antes de ir a la tienda. También es importante hacer unos cuantos cálculos para asegurarse y evitar desastres innecesarios.
Para calcular la cantidad de tejido que necesitas, multiplica la medida de tu ventana por 2 (o más si tienes pensado fruncir la cortina). Y si estás pensando en añadir dobladillos a ambos lados, conviene sumar unos 10 centímetros más.
No tener en cuenta el estilo decorativo de la habitación
En otras palabras, ¿quieres dar protagonismo a tus cortinas o prefieres optar por la funcionalidad? Si escoges lo segundo, asegúrate de que tu cortina cumple con las necesidades de esa habitación: tamizar o evitar el paso de la luz, aislar la ventana del frío o del calor, etc.
En cambio, si prefieres la estética, lo ideal es escoger una cortina que guarde cierta armonía con la decoración de tu habitación. Se trata, pues, de integrar este textil en la habitación sin que quede recargado.
Descuidar el tipo de tela
Dependiendo del uso que vayamos a hacer de nuestra cortina y del lugar de la casa, vamos a necesitar un tipo de tela u otra. Supongamos que estará en el dormitorio o en el salón, en este caso, la cortina será principalmente ornamental. Por ello, podemos escoger una tela de gran calidad y delicada, ya que no sufrirá el día a día.
En cambio, si se encuentra en habitaciones tan transitadas como la cocina y el baño, lo mejor es escoger una cortina de tejido resistente, duradero y fácil de lavar. Por ejemplo, fibras naturales como el algodón o bien un tejido sintético como el poliéster. También puedes ser práctico y optar por un estor, en el mercado actual encontrarás infinidad de diseños que tienen un componente más funcional que decorativo.